Colombia

Colombia es el país de la mega-diversidad. Este país al noroeste de Sudamérica constituye uno de los cinco así llamados países "megadiversos" del mundo, que disponen de una biodiversidad especialmente alta - lo que se denomina un biodiv hotspot. Algunos números bastan para subrayar el carácter especial de Colombia en este sentido.
El país, que se extiende entre el Pacífico y el Mar del Caribe, y que representa "sólo" el 0,8% de la superficie del planeta, albergando entre 45.000 a 51.000 especies vegetales (lo que significa alrededor del 15% de dichas especies vegetales a nivel mundial) así como 1752 especies de aves y 583 especies anfibias, posee una biodiversidad que no es superada por ningún otro país. Asimismo en lo que respecta al número de especies vegetales, que se desarrollan sólo en una determinada región, las así llamadas especies endémicas, Colombia ocupa un lugar de punta.

Una razón para esta riqueza de recursos biológicos está dada por la diversidad de sus paisajes. Colombia posee 18 ecosistemas regionales diferentes, con 65 ecosistemas diversos, que se extienden sobre una superficie de 1,14 millones de km2. Con ello Colombia asume el segundo lugar en lo que hace a diversidad biológica en Latinoamérica. Y esto sin considerar la plenitud de la diversidad en la zona aledaña al Pacífico, Chocó, y en las zonas marginales de las llanuras del Orinoco y la Amazonia, que aún no son suficientemente conocidas.

Datos acerca de la biodiversidad en Colombia

Biodiversidad Alemania-Colombia en comparación

Fuente: Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt. "Informe Nacional sobre el Estado de la Biodiversidad en Colombia". Santafé de Bogotá, Kolumbien, 1998

Sin embargo, pese a que Colombia posee esta alta biodiversidad, ésta disminuya en forma preocupante. Al momento presente el país experimenta un rápido proceso de cambio, que perjudica sumamente a esa biodiversidad de carácter único. Las causas de la pérdida de recursos biológicos son diversas: aquí cuentan la falta de valoración de la biodiversidad a nivel político y los conocimientos científicos insuficientes, así como el uso inadecuado de la tierra, la progresiva extensión de los límites de la explotación agrícola y el cultivo ilegal de drogas. Justamente la tala de superficies de bosques para cubrir la demanda de leña y de material por parte de la industria de la madera determinan una pérdida especialmente significativa de la riqueza de especies disponibles. Al momento se calcula la pérdida de la superficie de bosques del país en un 40%.

Entre otras razones, en reacción a este pérdida dramática de recursos biológicos el Estado colombiano ratificó en 1994 la Convenio de las Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica (CBD) de las Naciones Unidas. Con este normativa internacional se deberá fomentar la conservación, el conocimiento y el uso sostenible de la biodiversidad. Asimismo, los Estados signatarios se comprometen a una repartición equitativa de las ventajas que resulten de la utilización de recursos biológicos y de los conocimientos, innovaciones y prácticas concomitantes por parte de la ciencia nacional, la industria y la población local.
Más allá de esto, la Convención sobre la Diversidad Biológica fomenta la cooperación internacional entre países con alta biodiversidad (o aquellos donde aquella se vea amenazada) y países industrializados, la investigación científica y el desarrollo sostenible. En este contexto existe desde hace algunos años una cooperación intensiva entre la República Federal de Alemania y Colombia.